Plantar un nuevo césped: lo que se debe y no se debe hacer, en un vistazo

15/04/2021 - 00:00

Enséñame tu césped y te diré quién eres. Para muchas personas, su césped es su tarjeta de visita. Como paisajista o jardinero, tu trabajo consiste en hacer realidad este deseo. Pero todos sabemos que un césped verde requiere de trabajo duro, no sólo durante la plantación, sino también después. Con estos consejos, podrás mantener a tus clientes contentos, incluso cuando tu trabajo haya terminado. Buena suerte.

Medir es saber

Regla de oro: Antes de empezar, recoge toda la información posible sobre el suelo. ¿Cuál es su textura, qué estructura tiene y cuál es su acidez? Para tener una idea clara de la composición de tu suelo, haz un análisis de este.

  • Textura: ¿arcilla, limo o arena?

El análisis del suelo determina inmediatamente su textura.

¿Quieres comprobar por ti mismo si se trata de un suelo arcilloso, limoso o arenoso? Toma un poco de tierra en tus manos. ¿Mantiene su forma al apretarla o tocarla? Entonces se trata de un suelo arcilloso. La tierra limosa también mantiene su forma bastante bien, pero se desmorona al tocarla. La tierra arenosa es menos estable dimensionalmente y se deshace al abrir la mano.

En principio, un suelo no es “mejor” que otro, pero sus características específicas hacen que requieran un enfoque diferente. El suelo arcilloso, por ejemplo, es por naturaleza un suelo muy fértil. Retiene los nutrientes y la humedad. Desventaja: no deja pasar mucha agua y aire. Lo que sí hace un suelo arenoso. La desventaja en este caso es que este suelo retiene menos humedad y nutrientes. Sin embargo, se puede mantener mejor un suelo arenoso. Ciertamente, con el acondicionador de suelo adecuado compensarás las desventajas mencionadas.

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  • Material orgánico

El análisis del suelo también determina la proporción de material orgánico que contiene. Ese material –piensa en el compost verde o la turba– se suele añadir para mejorar la estructura del suelo. Se trata de la forma en la que las partículas del suelo están conectadas entre sí. Ten cuidado: la cantidad de materia orgánica no debe ser demasiado alta, porque eso perjudicará la permeabilidad al agua del suelo.

  • Valor del pH

El césped prefiere un pH ligeramente ácido de 5,5 a 6,5. ¿Por qué es tan importante el nivel correcto de acidez? Porque regula la absorción de nutrientes. Si el pH es demasiado alto o bajo, las raíces del césped absorben los nutrientes con menos facilidad. El nivel de acidez también se refleja en el análisis del suelo.

¿Quieres saber más sobre el valor del pH? Lee este blog.

En resumen, todo es cuestión de equilibrio. Cuando el suelo retiene suficientes nutrientes, drena bien y tiene un buen equilibrio entre la cantidad de agua y de aire, entonces tienes un suelo fértil para un césped exitoso.

CONSEJO: Informa a tus clientes sobre la composición de su suelo.
Conciéncialos sobre el tipo de suelo que tienen en su jardín y dales consejos. Explica, por ejemplo, que con un suelo arcilloso es importante perforar o escarificar el césped dos veces al año y evitar pisarlo después de un chaparrón. En cambio, con un suelo arenoso es fundamental regar más cuando se seca. Puedes leer más sobre esto en la sección de mantenimiento.

¿Sembrar césped o poner tepes?

Ahora ya conoces la composición del suelo. Segunda pregunta: ¿cómo vas a plantar tu césped? ¿Lo sembrarás o pondrás tepes? La respuesta depende de los deseos del cliente. ¿Quiere resultados rápidos o prefiere dejar que la naturaleza siga su curso? ¿Tiene habilidad para la jardinería?

Comparamos las ventajas y los inconvenientes:

  • Sembrar césped
Ventajas Inconvenientes
Más barato. Se tarda más en ver los resultados.
Fácil y rápido de instalar. No es necesario tener muchos conocimientos de experto. Lo único a lo que hay que prestar atención es a que el suelo esté bien preparado y a sembrar a la profundidad adecuada, idealmente entre 0,5 y 1 cm. Más cuidados posteriores. En las primeras semanas tras la siembra del césped, se dedica más tiempo al mantenimiento que con la colocación de tepes. Basta con pensar en quitar las malas hierbas y en el riego. La siega también requiere más trabajo de precisión.
Siembra suplementaria de las calvas que pudiera haber. A los pájaros les encantan las semillas de césped y a veces se las comen. Además, en caso de fuertes lluvias, las semillas pueden ser arrastradas, lo que significa que hay que volver a sembrar en esos lugares.
Periodo de siembra limitado. El momento ideal para la siembra es abril/mayo o septiembre/octubre, porque es cuando se tiene una temperatura ideal del suelo y, con suerte, menos evaporación.
Consejo: Invierte en semillas de calidad.
¿Por qué? Porque las semillas de buena calidad tienen un mayor índice de germinación, mejor viabilidad y pureza. Y eso significa: menos siembra para obtener una buena cantidad de cobertura de césped. Con las semillas baratas hay que sembrar más para obtener el mismo resultado. Además, estas semillas no están tan bien lavadas como las de calidad y, por tanto, contienen más malas hierbas, con todas las consecuencias adversas que ello conlleva. Presta también atención a la fecha de caducidad. Para una buena germinación, la semilla no debe tener más de 18 a 24 meses. Después de esta fecha, la germinación disminuye aproximadamente un 10% cada año. Otro aspecto para tener en cuenta: almacena siempre las semillas en un lugar seco.
En resumen, merece la pena elegir y almacenar las semillas con cuidado, porque con una buena germinación estableces los cimientos de tu césped para los años venideros.
  • Colocar tepes
Ventajas Inconvenientes
Resultado rápido. Tu cliente podrá disfrutar de inmediato de un césped bien cuidado. Mayor coste.
Menos cuidados después de la instalación. Aunque, también en este caso, es importante regar el césped a diario hasta que haya echado raíces. Esto puede ser por un período de hasta 28 días (con céspedes de estación fría). Requiere mucho trabajo. La colocación de los tepes es físicamente exigente. Los rollos de tepes pesan mucho y su colocación requiere un trabajo de precisión.
Se puede instalar (casi) en cualquier momento. Pero cuidado: no debe hacer ni demasiado frío ni demasiado calor, ni tampoco un tiempo demasiado seco. De hecho, el momento ideal para colocar el césped es durante un periodo en el que se sabe que habrá muchas precipitaciones.
CONSEJO: Sea cual sea el sistema que elijas, asegúrate de que haya un contacto firme entre la semilla o el rollo de tepe y el sustrato.
Si colocas tepes, debes presionarlo bien o usar un rodillo. Si siembras, debes presionar las semillas hasta que estén a una profundidad de entre 0,5 y 1 cm en el suelo.

¿Qué tipo de césped?

Hoy en día, existe toda una gama de variedades de césped. Todo depende del uso que el cliente haga de su césped. ¿Un uso intensivo, con niños corriendo? Lo mejor es utilizar césped de juego. Si el césped está destinado a la decoración, entonces el césped ornamental es la mejor opción. La ubicación también influirá en tu elección. Si el jardín está a la sombra, el césped que tolera la sombra te servirá. Si tu cliente es un jardinero “perezoso”, puedes recomendarle un césped de crecimiento lento. El color también suele ser un factor decisivo.

Mantenimiento: ¿Cómo mantener el césped más verde en tu lado de la valla?

Sea cual sea el césped que elijas, requiere tiempo y dedicación. La gente suele sustituir los parterres por césped porque cree que requiere menos trabajo. Nada más lejos de la realidad. Lo mejor es hacérselo saber a tus clientes. Con estos consejos de mantenimiento, podrás evitar decepciones.

  • ¿Cuándo segar?

Si siembras el césped, la primera siega es crucial. La siega debe hacerse paso a paso. No dejes que el césped crezca demasiado. Por término medio, el césped tiene buen aspecto cuando mide entre 3 y 4 centímetros. Elimina sólo el 30% del crecimiento en un momento dado y mantén este procedimiento con regularidad. ¿Por qué hay que hacer esto? El césped es una rareza de la naturaleza. Crece desde abajo, desde la raíz. Igual que el pelo. Si cortas la parte superior, estimulas el crecimiento a nivel hormonal.

Esta regla también se aplica tanto si siembras césped como si colocas tepes: no segar cuando el césped está muy húmedo y no segar cuando está demasiado seco. El césped largo hace que el agua se evapore más lentamente y, por lo tanto, retiene la humedad. Y recuerda: nunca segar más de 1/3 de la longitud de las hojas de hierba de una vez.

  • Riego

Con el calentamiento global, los veranos secos son la norma más que la excepción. Las consecuencias son visibles en tu césped. Aparecen manchas amarillas aquí y allá. El primer acto reflejo que nos viene a la mente es regar inmediatamente. Error. Lo mejor es no hacer nada al principio. Esas puntas amarillas son un mecanismo de defensa natural del césped. Una especie de autoprotección porque permite dirigir más energía hacia la raíz. El césped se recuperará cuando vuelva a llover. Pero lo que ocurre bajo el suelo es mucho más importante. En caso de sequía prolongada, las raíces crecen hacia abajo y eso es algo positivo. Si se regara superficialmente todos los días, las raíces crecerían hacia arriba. Y esto las hace más vulnerables y menos resistentes a la sequía. Por lo tanto, lo que debes hacer es regar abundantemente, pero con menos frecuencia para que el agua penetre profundamente en el suelo.

Aumentar las posibilidades de éxito a largo plazo

Ya lo sabes: un césped próspero requiere de trabajo duro. Y cuando tu trabajo está terminado, el destino del césped está en manos de tu cliente. Y, por supuesto, quieres que esté satisfecho durante mucho tiempo. Con un acondicionador de suelo de TerraCottem, aumentarás sus posibilidades de éxito a largo plazo. Inclúyelo en tu oferta desde el principio. Cuando obtengas el visto bueno de tu cliente, sólo tendrás que introducir TerraCottem en la tierra suelta. La profundidad ideal es de 20 cm, para favorecer el crecimiento de las raíces del césped en profundidad.

Todas las ventajas de un vistazo:

  • Germinación más rápida y mejor de las semillas de césped
  • Establecimiento más rápido de los tepes
  • Desarrollo de raíces más fuertes y profundas
  • Mayor retención de agua y nutrientes
  • Menos riego
  • Mayor resistencia al estrés por sequía y a las enfermedades
  • Por último, pero no menos importante: un cliente satisfecho al conseguir un césped más verde en su lado de la valla.

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